La principal razón es porque tu bebé necesita contacto. Ha vivido alrededor de 9 meses en tu vientre, después de nacer se enfrenta a un mundo desconocido y lo más parecido a estar dentro del útero es estar porteado.

Y como diría mi mentora, Elena López:

“El contacto es lo que tu bebé espera, para lo que está diseñado tras miles de años de evolución. Ofrecer contacto permite que la fisiología de tu bebé “funcione” de manera óptima, permitiéndole desarrollar todo su potencial intelectual, físico y emocional”.

Algunos de los beneficios son:

▪ Los bebés se sienten más seguros y protegidos: sensación similar a la del útero.

▪ Al sentirse protegidos y seguros lloran menos y están más tranquilos y relajados.

▪ Duermen mejor y el sueño es de mayor calidad.

▪ Potencia la lactancia materna: la cercanía del bebé provoca la secreción de hormonas como la oxitocina y la prolactina, con lo cual se estimula la producción de leche materna.

▪ Menos cólicos, vómitos, reflujo y gases.

▪ Mejor desarrollo psicomotor: el constante balanceo genera en los niños mejor equilibrio y mejor control postural.

▪ Favorece la estimulación temprana, estimulando todos los sentidos.

▪ El contacto ayuda a regular la temperatura del bebé.

▪ Ayuda a fortalecer (o restablecer) el vínculo emocional con sus padres, contribuyendo a un apego sano y seguro. El vínculo emocional es fundamental para el desarrollo afectivo y mental de nuestros hijos.

▪ Beneficia el ritmo cardíaco regular y la respiración.

▪ Nuestros hijos son más sociables, ya que están integrados en la vida diaria.

▪ Refuerza el vínculo afectivo con el padre y cuidadores. Al principio somos nosotras, las madres, a quién el bebé demanda más. El porteo ayuda a la integración del padre y otros cuidadores.

▪ Previene la depresión postparto. La cercanía del bebé provoca la secreción de hormonas como la oxitocina y la prolactina, hormonas del placer y del amor, entre otras, lo que ayuda al equilibrio hormonal.

▪ Al contrario de lo que muchos piensan, al tener cerca a nuestro bebé podemos atender oportunamente a sus necesidades, esto ayuda a desarrollar una mayor autoestima en el bebé, convirtiéndose en adultos más independientes y seguros.

▪ Los portabebés nos ayuda a evitar los dolores por cargar al bebé solo en brazos. El uso adecuado del portabebés favorece al control postural.

En resumen

En definitiva, los bebés necesitan contacto y nosotros necesitamos nuestros brazos libres.

Un portabebés nos permite dar contacto, supliendo las necesidades de nuestro bebé y, al mismo tiempo, tener los brazos libres, con lo cual ganamos mayor libertad de movimiento y autonomía.

PORTEO ERGONÓMICO

El porteo ergonómico respeta la posición natural (posición fisiológica) de tu bebé en todas las etapas de su desarrollo psicomotor y respeta el cuerpo del adulto.

¿Cuál es la postura natural o fisiológica del bebé?

▪ Espalda redondeada en forma de “C”. Protege el correcto desarrollo de su columna.
▪ Posición “ranita”: rodillas más altas que su cola con sus piernas formando una “M”. Lo cual protege el desarrollo de las caderas.
▪ Pelvis basculada: Lo cual permite mantener la espalda en forma de “C” y la posición en “M”.